Gestión de bots IA

11 Jun 25
La creciente proliferación de bots impulsados por Inteligencia Artificial (IA) exige mantener un control granular sobre el contenido y los permisos de acceso que se otorgan.
Algunos de estos bots cumplen funciones necesarias para la indexación y posicionamiento de contenidos en la web, mientras que otros operan de forma indiscriminada, consumiendo y relevando información sin consentimiento.
Creadores de contenido y empresas están observando cómo sus sitios web están siendo rastreados y utilizados para entrenar modelos de IA o para generar contenido derivado sin su consentimiento y sin llevarles tráfico. Esta actividad además de amenazar los modelos de negocio basados en la monetización de contenido, también puede generar un incremento no deseado en el tráfico, afectando el rendimiento del sitio y elevando los costes operativos.
Una reciente publicación de The Register, analiza el caso de la Wikimedia Foundation y destaca cómo su infraestructura, diseñada para picos de tráfico humano, con una lógica planteada para distribuir el contenido más demandado cerca de los usuarios, está sufriendo excesivas visitas de bots scraper de IA que no respetan la popularidad y visitan páginas de temas de menor interés que tienen que ser servidas especialmente. Esto consume mayores recursos y provoca un aumento significativo de los costes. Estiman que un 65% de su tráfico más costoso proviene de bots, aunque estos en realidad naveguen el 35% de las páginas. Sus responsables de infraestructura se plantean reducir el tráfico que generan los scrapers en un 20% medido en peticiones y un 30% medido en ancho de banda.
Los métodos de otorgar permisos y establecer reglas tradicionales, como el archivo robots.txt, han demostrado ser insuficientes contra bots de IA que ignoran los protocolos establecidos para acceder igual a los sitios web en busca de contenido. Se vuelve imperioso mitigar la actividad de crawlers LLM hiper agresivos. La clave reside en la capacidad de discernir entre bots «buenos» y «malos», y aplicar políticas de control específicas.
Para gestionar eficazmente el tráfico de bots, el primer paso crítico es su correcta identificación. Un bot es, en esencia, un programa automatizado que interactúa con sitios web. Su origen y propósito se pueden inferir a través de varios mecanismos:
La decisión de permitir o bloquear determinados bots es estratégica y depende de los objetivos de cada organización:
Perimetrical amplía las capacidades de su Bot Mitigation con una nueva funcionalidad que permite mayor granularidad a la hora de tomar el control sobre los bots de IA. Pone un énfasis particular en la verificación de bots de Google y está pensada para aquellos clientes que desean una gestión más sofisticada de su tráfico.
La clave de esta mejora radica en la verificación del origen de los bots de IA que se identifican como de Google, consultando con la propia compañía si dichas peticiones se originan en sus bots. Perimetrical ofrece una cabecera HTTP específica para que nuestros clientes puedan gestionar mejor sus bots:
Esta herramienta precisa aporta más posibilidades para proteger el contenido digital, asegurando que solo los bots autorizados y verificados puedan acceder a la información.
Transparent Edge se posiciona como un aliado estratégico para las organizaciones que buscan proteger y optimizar la entrega de su contenido digital. Nuestras soluciones están diseñadas para:
Internet continúa en constante evolución; hoy son las IA las que redefinen las interacciones en la web, y se trata de un escenario muy cambiante. Por eso Perimetrical ofrece herramientas necesarias para que las empresas puedan mantener el control sobre sus sitios web, diferenciando entre el tráfico que agrega valor y aquel que lo resta.